Casi idénticas a las cuentas estándar, pero con una diferencia importante: no se aplican cargos de swap. En lugar de un swap, cobramos una comisión. Para las operaciones en las que el swap es positivo, no se cobran comisiones; para operaciones en las que el swap es negativo, cobramos una comisión que equivale al 75% del swap (0,75 x swap).